Según datos de la Federación Española de Hostelería, en el año 2014 un total de 44.582 establecimientos echaron el cierre a sus negocios, frente a los 39.596 que abrieron sus puertas, lo cual supone una diferencia entre aperturas y cierres de 4.986 locales menos, un 60% más que en 2013.
Dentro este medio millar de locales cerrados, es el segmento de bares y restaurantes de comida tradicional es quien más se ha visto afectado, algo en cierto modo previsible ya que los bares son los establecimientos más numerosos en el conjunto de la hostelería. Ya en 2012, había 197.391 establecimientos de este tipo, descontando los restaurantes, bares que lograron una facturación de 51.363 millones de euros, cerca de la mitad del total de la hostelería. Estos cerca de 200.000 bares para una población de 47,2 millones de habitantes, supone un bar por cada 235 españoles.
A la hora de soportar los efectos de la crisis los bares contaban con una ventaja, ya que pese al descenso que se ha producido en los últimos años en su facturación, ésta partía de un aumento cercano al 50% en el periodo 2000 a 2008.
Pese al descenso en el número de establecimientos, las cifras económicas siguen en aumento puesto que en 2013 el sector de la hostelería facturó en España 109.080 millones de euros, cifra que fue superada en 2014, donde se estima una facturación cercana a los 113.000 millones de euros. Por su parte, la Federación Española de la Hostelería calcula que en 2015 se producirá un aumento en la facturación por encima del 4% hasta llegar a los 117.500 millones de euros, situándose de nuevo en los niveles de ventas de 2008 previos a la crisis. Datos en los que se tiene en cuenta los resultados de la restauración y la hotelería.
En cuanto a la empleabilidad en el sector, es preciso recordar que el 95% de los negocios tienen menos de 10 trabajadores y de ellos cerca de la mitad carecen de empleados, constando simplemente de autónomos. Pese a ello, sobre un total de más de 300.000 establecimientos entre bares, restaurantes, cafeterías y hoteles, se da empleo a 1,32 millones de trabajadores con una facturación de 119.823 millones de euros, datos sitúan a este sector como uno de los motores de la economía.